Mateguías: Ámsterdam

La verdad es que cada vez que escribo sobre una ciudad me cuesta mucho encontrarle defectos, ver su lado oscuro, parece que padezco de una ceguera parcial, que sólo me permite ver la belleza de los sitios, lo positivo de cada lugar. Y si encima hablamos de una ciudad como Ámsterdam, ya es que se me acaban los adjetivos. Y es que esta ciudad Europea enamora. Sus canales, el bullicio de sus calles, su oferta cultural y de ocio, la amabilidad y mente abierta de sus gentes, su arquitectura y modernidad. Creo que hasta la persona más negativa del mundo se enamoraría de sus rincones, quizás con su todo su odio atenuado después de la visita a algún que otro coffee shop.

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Ámsterdam engancha, enamora, vas con ganas de volver de nuevo, y a ojos de un matemático resulta aún más difícil ahogarse en la indiferencia. Y es que esta ciudad también tiene mucho que ofrecer para aquellos que nos gustan las ciencias exactas, y es en este pequeño texto donde os voy a trasladar a lo que matemáticamente me maravilla de esta urbe, ¿te atreves a sumergirte a un viaje insólito?

Paseando por la ciudad. Formas matemáticas!

Yo os voy a proponer algunos edificios de formas increíbles, pero os aseguro que hay muchos más, sólo es cuestión de echarse la mochila a la espalda y tirar millas por sus calles y alrededores.

Nuestra primera belleza matemática es un sitio alejado de las hordas de turistas, la biblioteca pública. Situada justo al Este de la Estación Central, este imponente y bello edificio tiene el honor de ser una de las bibliotecas públicas más grande de Europa. En su interior, una arquitectura increible, y más de 1.7 millones de volúmenes. Además cuenta con actividades para niños, por si sois de los que os atrevéis con los peques, y un restaurante en la 7ª planta. Por cierto, también son de mencionar sus bonitas vistas.

Nuestra segunda belleza matemática va a ser uno de los lugares más visitados: El museo Van Gogh. ¿Qué me decís de ir a este museo sin ver ninguna pintura? Es una muy difícil propuesta, y el contenido sin duda sobrepasa al continente, pero el edificio es digno de mención a mis ojos, y a los ojos de un arquitecto supongo que también ;). (Gracias Delfi por tus aportaciones gráficas)

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Desde luego que la intersección de objetos geométricos de la fotografía de abajo es sin duda irresistible para mí, aunque a muchos de vosotros os hayan ocasionado más de un dolor de cabeza jejeje.

Otra estructura digna de ver es el puente Python Bridge. Situado muy al Este de la ciudad y sus 93 metros de largo conectan Sporenburg y Borneo Eiland. Sus formas sinuosas pueden llegar a inspirar y llevarte al mundo de las funciones, o simplemente maravillarte.

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No quiero extenderme más, y como sé que os gustan mucho las fotos (o por lo menos a mi me encantan ;)), os dejo aquí unas cuantas más de edificios y monumentos de la ciudad que rezuman matemáticas por sus cuatro costados. (Muchas veces estamos tan acostumbrados a lo moderno que no nos damos cuenta de las maravillas que nos rodean).

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Ya que estamos de paseo, vamos a aprovechar para ver un par de puntos interesantes. El primero es la Estatua de Spinoza, filósofo Holandés, que además también realizó trabajos matemáticos, aunque de menor calado. El segundo es la residencia de Descartes, donde estuvo alojado cuando trabajó en la Universidad de Lieden.

Museo de ciencias: Science center Nemo

Bueno, esto de las formas geométricas por las calles y la arquitectura de la ciudad está muy bien, y para colmo es hasta saludable, pero ¿Hay algún museo matemático? voy a responder con una pregunta ¿acaso creíais que una ciudad como ésta no iba a tener un museo dedicado a las ciencias? Veamoslo 😉

Lo primero que impresiona es, como no, el tremendo edificio donde está alojado. Se trata de una mole que emula al casco de un barco verde, que fue diseñada por Renzo Piano, el mismo que se encargó de obras como la Postdammer Platz en Berlín, El Pompidiu en París o The Shard en Londres.

Dentro de sus cuatro plantas alberga numerosas exposiciones fijas, muchas de ellas ligadas al mar, aunque hay de todo un poco, como tecnología, ciencia y su historia, construcciones increíbles, viaje a través de la mente y matemáticas claro 🙂

Museo Nacional Marítimo

Realemente se trata de un museo de la historia naval del País, pero hay dos cosas que me encantan de él. La primera es la cantidad de artefactos de navegación que hay. Ya os mostré como eran en el artículo sobre el Real Observatorio de La Armada de San Fernando, y la relación que tienen con las matemáticas. En segundo lugar es la impresionante cristalera que tiene en su parte central. Por estos dos motivos no debes de perdértelo.

¿Queréis otra caminata? Tour matemático

Sí sí, como estáis escuchando. Si queréis daros un paseo por el centro y no tenéis ojos de matemático, podéis tomar prestados un par de ellos, los de vuestro guía, que os enseñará las rarezas que se encuentran escondidas dentro de canales, puentes y edificios, siempre desde el punto de vista de esta discipina. Quizás os hable también de famosos matemáticos que nacieron o vivieron en esta ciudad, como Huygens y Bernouilli. O tal vez también os hable de Dijkstra, seguro que a los informáticos os suena de algo este nombre. Si queréis más información dirigios a su sitio web

Como ya dije al comienzo de este artículo, Ámsterdam es una ciudad que cuando llegas a ella, ya estás deseando de volver. Así me siento yo en estos momentos, escribiendo este artículo, no se si me podré resistir mucho tiempo a la llamada de sus encantos. Pero el tiempo es finito y nuestro mundo muy grande y variado, aunque nunca se sabe.. 🙂